Introducción
Antes de seguir y buscar el suplemento que deseas, te quiero contar una cosa. La eficacia de la mayoría de los suplementos no está demostrada y tomarlos de la forma incorrecta hace que los suplementos con evidencia no sirvan.
De verdad, perdona por mostrarte la verdad otra vez. Solo quiero que sepas bien lo que te venden y puedas ignorar lo que no es necesario.
¡Vamos! Te muestro el truco para reconocer si un suplemento es realmente útil o no.
¿El truco es saber ciencia?
La verdad es que sí. Para entender realmente cuándo debes utilizar un suplemento u otro, tener criterio de cómo funciona el cuerpo es básico.
Por eso, si cualquier persona que te recomienda tomar un suplemento sin haber estudiado la fisiología humana, la ciencia que estudia el comportamiento humano, por favor duda, o al menos pide una segunda opinión a un profesional.
Si te dicen algo muy típico como: “Utiliza este suplemento que yo lo tomo y mira cómo estoy” o “prueba esto que mi prima corre mucho y es lo que utiliza”. También te recomiendo que dudes o pidas la opinión de un profesional.
Y bueno, se podría decir que yo soy profesional. Aunque la verdad, podrías dudar también.
Una frase que siempre digo es: “Me doy cuenta de que cuanto más estudio, menos se.”
¿Cómo? Porque la ciencia es eso, dudar de todo y dejar de lado el absolutismo.
Si alguien te habla con total certeza, te recomiendo que dudes o al menos pidas una segunda opinión.
No, no me he vuelto loco. La ciencia avanza muy rápido, hay muchos cambios y soy de los que piensa que es la base, pero lo más importante es la práctica.
Entonces, ¿qué hacemos? Pues, no te voy a dar una chapa fisiológica (¿Chapa? A mí, me encanta) y tampoco te voy a dar una lista definitiva de suplementos que sí funcionan. Junto con otra interminable que no funcionan.
Si sigues leyendo, te mostraré dónde buscar cada año la lista de las actualizaciones con el grado de evidencia, cómo tomarlo y espero que me des tu feedback con tu experiencia.
Así trabajamos los profesionales o al menos deberíamos. Dudar de todo y seguir avanzando, seguir aprendiendo.
¿Cuál es el camino fácil?
El truco está en entrar a las redes sociales y hacer caso a todos.
No, es broma. Ese camino no sigas por favor. Hay grandes profesionales divulgando, pero también hay mucho “Gurú”.
Sí si. Incluso yo podría ser un “Gurú” pero verás que no voy a ir a donde ti nunca con la verdad absoluta. Siempre te trasladaré la evidencia, lo probaré conmigo o daré mi experiencia y si no lo sé, te lo diré. Creo que ahí está la diferencia, en dejar el absolutismo a un lado.
Y bueno, dejando de filosofar un poco, seguimos.
Vamos con una buena noticia. Cada año, el Instituto Australiano del deporte o “The Australian Institute of Sport (AIS)” revisa la evidencia científica y actualiza la tabla con los suplementos de mayor a menor evidencia. Es decir, que este maravilloso grupo hace el trabajo duro para que puedas llegar con seguridad a la tienda donde vas a llenar la cesta de la compra.
Además, son muy rigurosos en indicar que aún tratarse de un suplemento con un grado de evidencia A (lo vemos ahora), de poco sirve si lo usas mal.
Otra buena noticia. La posología de cada suplemento lo podrás ver aquí. Además de tener en Nutriwik, herramientas para que te resulte más fácil.
Entonces, ¿cómo se clasifican por su grado de evidencia?
Realmente lo hacen muy muy fácil. De verdad, clasifican los suplementos en 4 grupos y en base a su evidencia le dan un nombre sencillo. Aquí los tienes:
- Grupo A: En este grupo están los suplementos con una evidencia sólida.
- Grupo B: Su apoyo científico puede ser emergente pero aquí encontramos suplementos que aún requieren más investigación.
- Grupo C: Aquí están los suplementos cuyos beneficios no han sido probados o carecen de investigaciones que puedan probar su eficacia.
- Grupo D: Se prohíben su uso por posible contaminación dopante.
Como ves, el nombre es muy sencillo. Buscan que puedas recordarlo fácilmente y que mejor forma que las primeras cuatro letras del abecedario.
Así, con la alfombra roja bien lisa te presento quienes son los protagonistas de cada sección:
Conclusión
Para bien o para mal, el organismo humano es una máquina muy compleja y la fisiología, aún tiene muchos secretos.
Por eso, te recomiendo fijarte siempre en grandes corporativismos que se actualizan y que hacen ensayos clínicos sin ánimo de lucro. Es la única forma de contrastar un suplemento o crearlo.
Y cómo no, experimentarlo tú mismo en el campo siguiendo el asesoramiento correcto y siempre en el entrenamiento.
¡Ah! Antes de terminar. Habrás visto que en el “Grupo D” entran los suplementos dopantes y tiene una lista interminable. Por eso, para que no te vuelvas loco en estudiarte todos, en el siguiente post te enseño la vía rápida y segura para solventar este problema.
¡Nos vemos pronto!